La obtención de datos

Cualquiera debe poder repetir u observar un hecho comprobable si se pretende que ello derive en la obtención de datos o de por lo menos un dato, pero no serán pocas las ocasiones en que para ello se precisen ciertos conocimientos respecto a datos y al hecho del que se trate.

Suficientes conocimientos

Tener los suficientes conocimientos influye para repetir u observar hechos comprobables.

La habilidad de interpretar datos

En cuanto los datos son comprobados, puede depender a menudo de que la habilidad de interpretar datos deba ser de cierto bagaje para que quien tenga que, o quiera, observar la comprobación en cuestión lo haga del mejor modo.

La complejidad de la comprobación

No pocas veces, sin embargo, tiene que ser alguien con los suficientes conocimientos quien, por la complejidad de la comprobación que sea, debe llevar a cabo esa comprobación para que así se obtengan datos validados de hechos comprobables.

Repetido y observado

El hecho comprobable es el que puede ser repetido y observado por cualquiera.

Los hechos comprobables

Es en los hechos comprobables en lo que los buenos datos deben estar sustentados.

Un tono de respeto hacia otras opiniones

Sobre todo al estar una opinión sustentada en lo puramente subjetivo, debe ésta reflejar un tono de respeto hacia otras opiniones iguales y, en especial, hacia las distintas.

Lo subjetivo

Dejando claro que se recurre a lo subjetivo en una opinión, puede de algún modo y hasta cierto punto quedar paliada la carencia de datos.

Si una opinión carece de buenos datos

Ya que de los buenos datos informativos depende en buena medida la valía de la información, si una opinión carece de buenos datos puede llegar a ser incluso más deficiente comparada con casi cualquier información que carezca de tales datos.

La valía de los datos informativos

Cuando no se refleja fehacientemente la valía de los datos informativos que se aportan, la información en cuestión suele carecer de una firme base.

Datos en lo opinativo

Los datos de fuentes fiables resultan asimismo determinantes para que se trate de datos en lo opinativo que den lugar a opiniones coherentes.

Fuentes de fiabilidad informativa

Al recurrir a fuentes de fiabilidad informativa queda por lo menos en buena medida garantizado que los datos obtenidos serán buenos datos.

Unos datos fiables

La información comprobable debe a su vez consistir en unos datos fiables para devenir buena información.

Información comprobable

Para que una información sean buena, debe consistir en información comprobable por cualquiera que, con los debidos conocimientos, la consulte.

Buenos argumentos opinativos

Cuando una opinión está construida con buenos datos, éstos dan forma a buenos argumentos opinativos y, de ahí, más fuerza a toda la opinión de la que se trate.

Encadenar datos

Para pretender que una información o una opinión estén bien elaboradoras, un buen resultado en cuanto a encadenar datos con los que fundamentar esa información u opinión será imprescindible.

¿Puede una opinión fundamentar una información?

Si la información es la base para formar opiniones, ¿puede una opinión fundamentar una información? En caso de una opinión sensata, justificada, elaborada y coherente, en principio sí.

Informaciones a partir de otras informaciones

Elaborar informaciones a partir de otras informaciones requiere una notable habilidad para no desvirtuar el fondo de las informaciones de partida.

Opiniones a partir de informaciones

Que la coherencia de unas opiniones sea manifiesta depende de que éstas a su vez sean opiniones a partir de informaciones por lo menos en buena medida y que tales informaciones sean asimismo buenas y coherentes.

Opiniones a partir de otras opiniones

Para hacer opiniones a partir de otras opiniones cabe que la coherencia de justo las opiniones de partida sea manifiesta.

Una opinión coherente

Por buenas que la información y la opinión sean, si se combinan sin más, emitir una opinión coherente resultará muy complicado.

La formación de opiniones

De las fuentes informativas de buena calidad depende que la formación de opiniones derive en ideas que no estén faltas de sustancia y sentido.

Fuentes informativas de buena calidad

De las fuentes informativas de buena calidad depende la buena calidad de la información. Por esto, no citar ni justificar el origen de aquello de lo que se informa puede denotar calidad mala.

Buena información

Construir y seleccionar buenas opiniones sin disponer de buena información para hacerlo resultará casi o del todo imposible.

Intercambiando opiniones

La conectividad mundial debiera favorecer que, a base de ir intercambiando opiniones, pueda la humanidad incrementar su espíritu crítico y el respeto mutuo entre individuos.

Telecomunicaciones ecológicas

Gracias a Internet se puede estar dando un muy probable buen paso hacia unas telecomunicaciones ecológicas para que así la conectividad mundial vaya mucho más acompañada del respeto medioambiental.

Contaminación acústica

En un descenso de en concreto la contaminación acústica sería de entre lo más inmediato en que también redundaría un menor número de megalópolis.

Contaminación atmosférica

En un descenso de en concreto la contaminación atmosférica sería de entre lo más inmediato en que redundaría un menor número de megalópolis.

Descenso de la contaminación

En un descenso de la contaminación sería de entre lo más inmediato en que redundaría un menor número de megalópolis.

Las megalópolis

Aunque todo parece que se ha ido encaminando en los últimos tiempos hacia las grandes concentraciones de población humana en urbes, no es seguramente lo que sólo resultan las megalópolis el mejor camino a seguir.

Las actuales telecomunicaciones

Debido a que las actuales telecomunicaciones interconectan prácticamente toda la humanidad, se evita mejor que un reparto poblacional devenga en ciertos aislamientos.